Desde semanas, si no meses, se daba por suceso que el premio al Jugador Más Valioso de la NBA recaería en uno de dos jugadores. A 10 días del final de la temporada 2024-25, solo queda una cosa por determinar en una de las carreras por los premios más reñidas que hemos visto en mucho tiempo: ¿Levantarán Shai Gilgeous-Alexander o Nikola Jokic el Trofeo Michael Jordan?
Para empezar, una forma sencilla de captar lo excepcionales que han sido Gilgeous-Alexander y Jokic esta temporada es observar que Giannis Antetokounmpo, quien promedia aproximadamente 30 puntos, 12 rebotes y seis asistencias, con un porcentaje de tiro de campo superior al 60% y una excelente defensa, ni siquiera figura como aspirante.
Quedó tercero en las cuotas de MVP de ESPN Bet publicadas a principios de esta semana… con 100-1. Algunas casas de apuestas ni siquiera lo tienen en la lista.
Discutan eso si quieren, pero así son las cosas cuando se enfrentan a lo que quizás sea la mejor temporada ataque de un centro en la fue de los 3 puntos y una de las mejores temporadas completas de un guardia, que lidera un equipo con el mejor margen de anotación de todos los tiempos.
Expondremos algunos de los hechos básicos:
Jokic promedia 29,7 puntos, 12,8 rebotes y 10,2 asistencias, compitiendo por convertirse en el tercer jugador en promediar un triple-doble. Lo elabora con un 63% de oportunidad en balazos de dos puntos y un 42% en triples, lo que supone un 66% de oportunidad en balazos reales, nueve puntos porcentuales mejor que el promedio de la liga.
Los Nuggets ocupan el tercer lugar en valoración ataque a pesar de ser los últimos en porcentaje de intentos de triples , gracias a la inigualable habilidad de Jokic para anotar en la pintura y bloquear a los cortadores, mientras procesa las rotaciones defensivas de los rivales con la velocidad de una supercomputadora.
Es importante insistir en esto porque Jokic ha suceso que lo previamente imposible parezca tan rutinario que podemos darlo por sentado: el anotador de poste bajo más prolífico de la NBA también ocupa el segundo puesto en asistencias, el séptimo en puntos luego de cortes, el top 20 en porcentaje de triples y el percentil 89 como manejador de balón en pick-and-roll.
Cuando no está disparando triples, rodando en corto para flotadores suaves, presionando a los defensores con el hombro para despejar espacio para su gancho automático o confundiendo la zona del lado débil con pases precisos sin mirar, está lanzando lanzamientos de tres cuartos de cancha con un movimiento de muñeca.
Gilgeous-Alexander se alejó un poco de la contienda desde la reciente ausencia de Jokic por lesión de cinco enfrentamientos, pero lo que Jokic ha logrado durante su regreso —incluyendo un triple-doble de 61 puntos en la pérdida en doble prórroga frente a los Timberwolves el martes sin Jamal Murray ni Michael Porter Jr.— debería haberle dado un impulso.
Expresa mucho que determinado logre el primer enfrentamiento de 30-20-20 de la historia, y ni siquiera se puede ratificar que haya sido su enfrentamiento más impresionante de la temporada.
En su propia opinión, el jugador que ha ganado tres de los últimos cuatro MVP está jugando mejor que nunca. Pero aún así, puede ser no ser suficiente para ganar su cuarto trofeo esta temporada, ya que Gilgeous-Alexander, el base de los Oklahoma City Thunder con un toque de Gumby, cuyo cuerpo parece moverse en tres direcciones y a tres velocidades distintas a la vez, ha sido así de innegable.
Joe Wolfond
The Score
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